¿Has querido en algún momento de tu vida realizar algún cambio pero no has sabido por dónde empezar?
Generar nuevos hábitos en tu rutina es una de las claves fundamentales para obtener el éxito en cualquier proceso de transformación. En este artículo te comparto 5 hábitos que puedes comenzar a implementar en tu rutina desde hoy mismo y que marcarán la diferencia en tu vida.
¿Por qué son importantes los hábitos?
Nuestro cuerpo y nuestra mente son un gran sistema que funcionan en más del 90% a través de movimientos y programas inconscientes. Nuestro organismo automatiza ciertos procesos que se activarán de forma automática en la siguiente ocasión que estemos en un escenario similar.
Los sistemas de creencias, patrones de conducta, fidelidades etc…son algunos de los programadores de estos hábitos. Sin embargo, tenemos la capacidad de reprogramar patrones ya instalados en nuestro sistema activando nuevos hábitos encaminados hacia el bienestar en nuestra vida.
Rick Hanson, un reconocido psicológo, afirma que el cerebro es un órgano que aprende y está diseñado para cambiar con la experiencia. De esta manera, una actividad repetida, intensa o prolongada en el tiempo acaba dejando una huella en la estructura neuronal. Hablamos de la neuroplasticidad dependiente de la experiencia.
Y es aquí, donde los hábitos juegan un papel clave en esta reprogramación. Comenzar a introducir nuevas actividades en la rutina de forma repetida y con la intensidad clara en lo que estamos haciendo y para qué lo hacemos; logrará marcar la diferencia y activar el éxito en nuestra vida.
Así, que si has llegado hasta aquí, te invito a activar con estos sencillos hábito una nueva programación para el éxito desde hoy mismo.

Los 5 Hábitos que Transformarán tu Día
Hábito 1: Conecta con tu Cuerpo
La mayor parte del tiempo andamos en piloto automático. Es fundamental establecer anclas para conectar con nuestro cuerpo físico.
Sentir cómo se encuentra, identificar tensiones, adecuar posturas y sobre todo, sentirnos unidos a nuestro vehículo para vivir: NUESTRO CUERPO.
Te invito a que incorpores estos dos ejercicios en tu rutina diaria:
- Estira: puedes hacerlo al levantarte y a lo largo del día. Simplemente con que dediques unos minutos a volver la mirada a tu cuerpo, sentirlo y moverlo serán suficientes para activar el cambio.
- Respira: nuestro cuerpo es el vehículo para vivir pero gracias a que respiramos, estamos vivos. Igual que antes, dedica unos instantes a sentir tu respiración. Lleva toda tu atención a ella, como si no hubiera nada más. Observa su ritmo, tu capacidad respiratoria y sobre todo conecta con la vida.
Si quieres acceder a mi plan de entrenamiento para activar y mejora la toma de consciencia en tu día a día, accede al Podcast y a los programas dedicados a ello.
Hábito 2: Aliméntate con calidad
Cuando activamos nuevos programas de consciencia y sobre todo cuando queremos incorporar nuevos hábitos en nuestra rutina, es fundamental ser consciente de lo que hacemos en realidad.
La alimentación es uno de los ejes principales para sentirnos bien pero más allá de hablar de hábitos saludables o planes de alimentación, te propongo que lleves tu atención a cómo te alimentas. Desde cómo compras, cómo diseñas tus comidas, qué comes fuera de casa, cómo varía tu alimentación según de estado de ánimo, cuándo quieres comer alimentos más dulces, cuándo más salados etc…
Este hábito te llevará a darte cuenta de cómo te alimentas realmente y cómo tu cuerpo de pide el alimento qué necesita. Una vez que vayas detectando aspectos relevantes para ti, podrás poner en marcha mecanismo de transformación y mejora. Si quieres alguna idea, accede a todos los artículos disponibles en la sección hábitos saludables.
Hábito 3: Nutre tu interior
Dedica al menos 20 minutos al día a realizar alguna activa para nutrirte interiormente. Poco a poco sentirás cómo tu propio cuerpo te demanda estas actividades para sentirse mejor.
Tómalo con calma al inicio. Selecciona bien los tiempos que vas a dedicar a cada actividad y cuál de ellas vas a realizar. Recuerda que el éxito radica en ir integrando de forma efectiva estos nuevos patrones en la rutina. Aunque creas que estás haciendo poco, la huella en tu sistema se va grabando. Disfruta del proceso.
Las dos actividades que te invito a iniciar son meditación y lectura. Aprovecha los trayectos para escuchar audiolibros, podcasts de tu interés o música relajante.
Hábito 4: Fija Objetivos
Al inicio de cada día, define 3 objetivos que quieres conseguir al finalizar el día y escríbelos. Estos han de ser lo más concretos y claros posibles para comenzar a activar esos interruptores motivaciones internos de que el cambio es posible.
Algunos ejemplos de objetivos son: ir caminando al trabajo, beber 2 litros de agua, hacerme un regalo etc…Recuerda, que estamos en las bases. Comienza por lo crees más simple. Al final, es en cada pequeño paso donde radica el éxito.
Hábito 5: Revisa y desconecta
20 minutos antes de irte a la cama, desconecta tus dispositivos móviles y cualquier elemento de conexión con el exterior. Coge tu lista de objetivos de ese día y revisa cuáles has conseguido y cuáles se han quedado sin éxito.
Es tu momento de reflexión y conexión con todo tu día. No se trata de activar culpas ni juicios. Simplemente, detente ante cada objetivo y pregúntate:
- Objetivo conseguido: Sonríe y felicítate, ¡puedes hacer lo que te propongas!
- Objetivo no alcanzado: pregúntate ¿qué hubiera necesitado para conseguirlo? y usa esa respuesta como motor para tus próximos objetivos
Como ves, son 5 hábitos sencillos que puedes incorporar desde ya mismo. Recuerda que no es una competición. Tú decides cuáles de ellos activar y cuándo. Es tu reprogramación y solo tú puede decidir cuándo quieres comenzar a sentir que el cambio es posible. Y en cada momento, simplemente DISFRUTA por que ESTÁS VIVO.